DOLOROSA DERROTA

CD.Cieza: Alex Sarriá, Richard, Paco Cánovas, Dani Cánovas, Manolo Illán, Fernando Gálvez (Pelé), Ignacio (José Piñera), Julio César, David Karanka, Balbino y Ernesto (Ismael).
CF.Molina: Gil, Jorge Zaragoza, Ginés (Paco Illán), Juanfran (Párraga), Pekas, Félix, Perkins, Fran, Mario (Valentín), Gonzalo y Vidal.
Goles: 0-1 m.10 Perkins. 0-2 m.30 Fran. 1-2 m. 53 David Karanka. 2-2 m.76 Pelé. 3-2 m.86 José Piñera. Árbitro: Ros Gómez. Amonestó al local Ernesto y a los visitantes Juanfran, Pekas, Fran y Mario.
Incidencias: Municipal La Arboleja, unos 1.100 espectadores..

Encabronada derrota del Cf.Molina  en cieza, el equipo molinense dio un auténtico recital de fútbol en el primer periodo, Perkins abria el marcador a los 8´minutos, para que a la media hora Fran de excepcional cabezazo a la salida de un corner consiguiese el 0-2, con un Cd. Cieza roto en este primer periodo los azurrís los bordaron desde el minuto 1´al 45´. En el segundo acto como ya espereabamos el equipo melocotonero o espartero como ustedes prefieran saldria a por todas, como asi ocurria en los primeros compases, Karanka acortaba distacias tras un despeje de Gil fuera del area con la fortuna que le llegase el balón al vasco delantero a puerta vacia 1-2 minuto 52´ Ginés tuvo la gran ocasión de matar el encuentro instantes despues lo que hubiese supuesto el 1-3 pero Alex Sarria le ganaria la partida. El cieza lo seguia intentando, y así llegaria el empate de forma poco elegante, cuando Jorge Gonzalez caeria en el area visitante, mientras que los locales (estando en su derecho) no echaron el balón fuera para ser atendido el jugador moliense, asi Pele sorprenderia a un Gil adelantado subiendo el 2-2 golazo. El encuentro se tranquilizaria y parecia que las tablas iban a ser el resultado final, pero los ciezanos que siguieron teniendo fé en la victoria marcarian el definitivo 3-2 a 3´minutos de final por mediación de Piñera. No se merecian los jugadores y el cuerpo técnico esta derrota, y la posterior impotencia, pues con un planteamiento valiente en el primer periodo y arriesgado en el segundo, no nos merecimos venir de vacio.